La pala Softee para pádel está preparada para satisfacer las exigencias de todos los públicos, especialmente los de tipo profesional. Pero también de cualquier otro perfil, incluso de los recién iniciados en este deporte. Se pueden descubrir modelos de todos los tipos, para control o para potencia, incluso para desarrollar un juego polivalente. Sus diseños también son muy atractivos y originales, normalmente con el logotipo de la marca ocupando la mayor parte de los planos. La oferta de colores es muy variada. Tanto si se prefieren los estilos discretos como los provocativos, resulta fácil encontrar uno que esté en consonancia.
En función de la zona concreta de la pala que se analice, se pueden encontrar:
En pádel siempre surge la duda entre ligereza y firmeza. En el primer caso, la pala pesa menos, por lo que se puede mover con mayor velocidad y sin tanto desgaste físico. En el segundo caso, la pala pesa más, pero compensa este inconveniente con una mayor potencia en los lanzamientos. No es fácil encontrar modelos que equilibren estos parámetros. Sin embargo, estas palas salen airosas del desafío. Casi todas presentan un equilibrado peso comprendido entre los 355 y los 375 gramos.
En cuanto a las medidas, conviene empezar por el perfil, es decir, el grosor. A mayor espesor, mayor fuerza en los lanzamientos. Estos modelos suelen incorporar un diámetro de 38 milímetros, un formato ideal para incrementar la intensidad de los golpes. De hecho, es el tamaño máximo admitido por la Federación Española de Pádel, con una tolerancia del 2,5 %.
El resto de las medidas también se sitúan dentro de los estándares establecidos por este organismo. Es decir, un máximo de 45,5 centímetros de largo entre la cabeza y el puño, así como 26 centímetros de ancho. Pese a que en las palas de potencia los planos son más alargados que en las de control, no es un factor que incremente per se las medidas del conjunto. De ahí que la pala Softee para pádel pueda dar buenos resultados incluso en torneos exigentes.
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